En el competitivo mundo laboral actual, la selección de personal no se trata solo de encontrar candidatos con las habilidades adecuadas, sino también de identificar a aquellos con el potencial de crecimiento y la motivación para prosperar dentro de la organización. Es aquí donde la evaluación del Potencial de Desarrollo Laboral (PDL) se vuelve indispensable.
La evaluación PDL es una herramienta psicométrica que permite a los profesionales de Recursos Humanos ir más allá de las competencias y la personalidad, es importante para medir el nivel de ambición, entusiasmo y compromiso de un candidato con su desarrollo profesional.
Imagine poder predecir:
1.- El nivel de apatia o motivación
2.- Su capacidad para asumir nuevos retos y responsabilidades.
3.- Su potencial para crecer dentro de la empresa.
4.- Medir el empuje del evaluado.
5.- Medir el nivel de competitividad de la persona.
6.- Medir la velodidad de crecimiento laboral
Esto y más, es lo que le ofrece esta prueba de solo 20 reactivos y 5 minutos de aplicación.
Descubra el potencial oculto de sus candidatos! Con 20 preguntas clave, la Evaluación PDL revela si su candidato es un talento de alto impacto con gran empuje y claridad de metas, o si su perfil es más apático y con bajo potencial de crecimiento. ¡Tome decisiones de contratación más inteligentes y eficaces!
Si bien la aptitud (habilidades y conocimientos) es fundamental para desempeñar un trabajo, la actitud (disposición, motivación, entusiasmo) a menudo se convierte en el factor determinante para el éxito a largo plazo. ¿Por qué? Aquí te presento algunas razones:
Adaptabilidad al cambio: El mundo laboral actual es dinámico y exige constante adaptación. Una persona con buena actitud se muestra flexible, receptiva al aprendizaje y dispuesta a enfrentar nuevos desafíos, mientras que alguien con excelente aptitud pero resistente al cambio puede estancarse.
Trabajo en equipo: La actitud positiva, la colaboración y la empatía son esenciales para un buen ambiente laboral y la eficacia del trabajo en equipo. Una persona con mala actitud, aunque sea muy hábil, puede generar conflictos y afectar la productividad del grupo.
Motivación y empuje: La actitud influye directamente en la motivación y el compromiso. Un empleado con buena actitud, aunque tenga menos aptitud inicialmente, se esforzará más, aprenderá más rápido y estará más comprometido con sus objetivos y con la empresa.
Competitividad e integración: La actitud proactiva y el deseo de superación impulsan el crecimiento profesional. Una persona con buena actitud busca constantemente aprender, mejorar y asumir nuevas responsabilidades, lo que impacta positivamente en su desarrollo a largo plazo.
Candidatos para puestos de todos los niveles: Desde operativos hasta altos ejecutivos. La prueba ayuda a identificar aquellos con mayor ambición, compromiso y potencial de crecimiento, más allá de sus habilidades y experiencia. Candidatos para puestos clave: Es especialmente útil para puestos estratégicos o de alta especialización, donde la actitud y el potencial de desarrollo son cruciales para el éxito a largo plazo.
Por supuesto, puede aplicar a empleados en proceso de promoción:
Ayuda a identificar: A los empleados con mayor potencial para asumir nuevas responsabilidades y liderar equipos.
Empleados en programas de desarrollo: Permite evaluar el potencial de crecimiento de los empleados y diseñar planes de capacitación más efectivos.
Empleados en puestos con alta rotación: Ayuda a comprender las razones de la rotación y a identificar a los empleados con mayor riesgo de abandono.
Fase inicial: Puede ser utilizada como un primer filtro para identificar a los candidatos con mayor potencial y reducir el número de candidatos a evaluar con otras herramientas más costosas o que requieren más tiempo.
Fase intermedia: Después de una primera evaluación de currículums y pruebas de competencias, para profundizar en la evaluación de la actitud y el potencial de los candidatos preseleccionados.
Fase final: Como complemento a la entrevista final, para confirmar la elección del candidato y obtener información adicional sobre su potencial de desarrollo.
No, es importante diferenciar, esta prueba mide la actitud de la persona (entusiasmo, empuje. motivación, apatia, etc.), y no la aptitud o capacidad de la persona. Por ello, esta prueba se considera una prueba complementaria a la evaluación de las competencias laborales requeridas por el puesto.
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